Por qué Legal Now Means Business
La abogacía ya no es solo una profesión: ahora es un gran negocio, con la vista puesta más que nunca en la rentabilidad y la eficiencia, según analiza Mark A. Cohen en un reciente artículo de Forbes.
"El derecho es ahora un taburete de tres patas apoyado en conocimientos jurídicos, tecnológicos y empresariales", escribe Cohen. "Los tecnólogos trabajan con los abogados -usuarios finales- para diseñar soluciones que automaticen los procesos y transformen en productos los servicios que requieren mucho trabajo. Los expertos en negocios han inyectado gestión de procesos y proyectos en la prestación de servicios jurídicos y la han alineado mejor con la velocidad, la eficiencia, la rentabilidad y la transparencia de los negocios."
Por ello, los equipos jurídicos de las empresas están recurriendo a las operaciones jurídicas y a la tecnología jurídica para hacer frente a los crecientes retos y tensiones a los que se enfrentan, según escriben nuestros amigos de ThinkSmart en un artículo reciente.
"Como hemos señalado, hay presiones crecientes que impulsan a los departamentos legales corporativos a adoptar nuevos enfoques para la prestación de servicios legales", afirma Kelli Negro, CMO de Mitratech. "Construir capacidades de operaciones legales y adoptar tecnologías como la automatización del flujo de trabajo legal (¡sorpresa!) son algunas de ellas".
¿Por qué las empresas se precipitan en masa hacia las soluciones que ofrecen las operaciones jurídicas y la tecnología jurídica? Sencillamente, sus costes se les están yendo de las manos y el dinero habla.
Según la Encuesta sobre el Estado de la Industria de CLOC, las empresas gastan actualmente, por término medio:
- 60 millones de dólares en gastos jurídicos externos
- 221.000 dólares de gasto interno por departamento jurídico
- 607.000 dólares en gastos jurídicos externos por abogado interno
El 56,2% de los departamentos jurídicos utilizan ahora métricas formalizadas o programas de información, según una encuesta del Grupo Blickstein.
¿La otra opción para controlar los costes? Utilizar la tecnología jurídica como remedio.
"La automatización del flujo de trabajo jurídico es lo que llamaríamos una tecnología esencial si estos equipos de operaciones jurídicas en crecimiento se toman en serio su misión: Permitir que el departamento jurídico preste más servicios, pero haciéndolo de forma más rentable", afirma Kelli Negro.
¿El truco final, según ThinkSmart? La automatización de los flujos de trabajo jurídicos suele ser mucho menos costosa que otras inversiones en tecnología y, al mismo tiempo, tiene un impacto más duradero en el éxito de las operaciones jurídicas.